En 1945 se produjo el desastre de Hiroshima, el que mató a muchas personas.
De entre los sobrevivientes, recordamos a una niña llamada
Sadako
Nueve años después de este brutal acontecimiento su salud comenzó a decaer, los médicos le diagnosticaron: leucemia.
Su mejor amiga le habló de una vieja tradición del origami, la que consistía en plegar mil grullas, una vez lograda esta meta podría pedir un deseo a los dioses.
su amiga le regaló la primera grullita, con la que Sadako comenzó la ardua labor de plegar con los pocos papeles que encontraba en el hospital.
Ella ansiaba volver a correr.
Lamentablemente, luego de 14 meses de estar hospitalizada, Sadako muere sin alcanzar su meta, solo logró plegar 644 grullas.
Esta historia ha sido tan impactante para el mundo enteros y los origamista, que cada 6 de agosto nos reunimos para plegar MIL GRULLAS y así pedir por la PAZ MUNDIAL.
Este año nos juntaremos el Domingo 5 de agosto en el Jardín Japonés (por el acceso de Pedro de Valdivia) del Cerro San Cristóbal a las 11.00 hrs.
Lleven sus grullitas entrelazadas para colgar en el jardín japonés o material para preparar en el lugar.